Muy ansiosas y preguntándose si podrían lograrlo llegaron las primeras pacientes oncológicas del INC beneficiadas con esta primera experiencia piloto de las clases de pole dance que hemos denominado “Pole para todas” este lunes 07 de enero de 2019.

Las clases no se imparten en INC sino que en una sala adecuada completamente para esta actividad, ubicada en Providencia, y las pacientes llegaron temprano para disfrutar y aprender en su primera lección.

Poco a poco fueron entrando en confianza y presentándose frente al grupo. Daniela y Francisca “Kika” González, son hermanas y también las creadoras de “Espacio Vuela”, cuyo objetivo es que después de terminar este piloto de seis semanas las pacientes saldrán completamente renovadas y seguras de sí mismas.

La partida

Antes de iniciar sus clases, las pacientes fueron evaluadas respectivamente por Daniela e Iván, ambos médicos de profesión y como se indicó anteriormente son parte de los creadores del taller con bastante experiencia en el rubro.

Luego de conversar y conocerse un poco más pusieron manos y piernas a la obra, todas indicaron jamás haber hecho algo parecido pero gracias al apoyo de Kika y Daniela no tuvieron problemas para partir y comenzar a lanzarse en algo que ya no parecía tan desconocido.

Sandra Onetto, una de las pacientes dijo “me gusta participar de todas las cosas que organiza el instituto, esto nos hace mantenernos con muchas cosas en mente y personalmente trato de incluirme en todas las actividades que aquí se realizan”.

Las postulaciones se realizaron a través de redes sociales y correos a partir del jueves 06 de diciembre de 2018, día en que se realizó la actividad “Sueños”, donde fue presentado el taller fue como un regalo para nuestras pacientes.

Actividad que “nos expone y nos conecta”, dicen sus creadoras

“Pole para todas” es una estrategia innovadora para mejorar la calidad de vida y en las propias palabras de sus instructoras: “Aprender Pole Dance es movilizador, nos expone y nos conecta. Es una experiencia de reconciliación con nosotras mismas como mujeres, que somos parte de una sociedad que intenta imponernos maneras de ser, de actuar o de vernos que no son necesariamente lo que expresaría nuestra esencia si fuera más libre”.

Entre los aspectos físicos destacan que es un ejercicio en su mayoría de resistencia anaeróbica, con carga liviana desde el inicio que va aumentando de acuerdo al progreso y tolerancia de la persona. Se entrenan también el equilibrio, la propiocepción y la flexibilidad.

Y entre los beneficios directos destacan que hay una mejoría significativa de la fuerza y la resistencia muscular; necesidad de un menor esfuerzo para realizar actividades de la vida diaria; entrenamiento con carga de peso: ha demostrado ser seguro y efectivo en mujeres con o en riesgo de tener linfedema relacionado al cáncer de mama; entrenamiento con resistencia progresiva: reduce el riesgo de linfedema sin aumentar el volumen braquial ni la severidad del linfedema referida por las pacientes, y mejoría en dominios físicos de calidad de vida y una disminución de la severidad de los síntomas de linfedema.

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